Homilía Beatificación Mártires de Astorga

Omelia nella Beatificazione dei Martiri di Astorga (versione originale e traduzione in italiano)
29-05-2021

Queridos hermanos y hermanas:

nos hemos reunido aquí para alabar al Señor, que revela en los débiles su potencia y da a los frágiles la fuerza del martirio (cf. Prefacio de los Santos Mártires). Débiles, lo somos todos nosotros. Pero, acabamos de escuchar la palabra del Señor: No temáis, ¡no tengáis miedo! Por tres veces Jesús lo dice a sus discípulos y lo repite también a nosotros, porque sabe que tenemos auténtica necesidad de oirselo repetir. Débiles, lo eran también estas tres hermanas nuestras. Sin embargo, desde hoy la Iglesia las honra oficialmente como mártires de Cristo: han recibido de hecho la corona de la vida, prometida por el Señor a cuantos lo aman (cf. Sant 1, 12).

No temáis. El miedo es una emoción siempre posible en nosotros. Se manifiesta, a veces, en nuestras decisiones; otras veces está relacionada con nuestras indecisiones. La nuestra es, con todo, una sociedad marcada por el miedo. Un conocido sociólogo (Z. Bauman) la ha llamado “liquida”, porque nos invade cuando más buscamos protegernos y tanto más prospera cuanto más hacemos de la “seguridad” un criterio de vida. El verdadero problema para nostros es cuando el miedo determina nuestras decisiones, o tal vez nos hace renunciar a nuestras convicciones; cuando nos bloquea en nuestras relaciones con los demáas y también con Dios.